viernes, 29 de abril de 2011

Es de los hombres…


Es de los hombres
que quieren aventuras y quieren sueños,
pero la mayoría temen montarse en ellos.

Es de los hombres
que desean remontar el vuelo
cabalgando sobre estrellas fugaces
para viajar hasta lunas de plata,
pero una vez que han despegado
temen caer al suelo.

Es de los hombres
que anhelan descubrir secretos
que se esconden en estrellas lejanas,
pero una vez que salen de casa
se dan cuenta que no llevan suficiente abrigo
y que pueden coger un resfrío.

Es de los hombres
esta ambigüedad,
este constante tironeo
entre sus sueños
y sus miedos.

miércoles, 27 de abril de 2011

Fruto


El hombre es como un fruto.
Apenas nace es joven e inmaduro,
pequeño terso y suave,
tiene toda la potencia en si
pero aún no la ha desarrollado.
Cuando llega a la adultez madura,
el fruto adquiere todo su color,
todo su sabor y potencia,
su forma es plena, aunque pierde
la perfección y suavidad de la infancia.
Cuando cuándo llega a la vejez
comienza su deterioro, como el fruto
se ablanda y empieza a arrugarse.
En esa etapa llega el tiempo
en el que se desprende del árbol,
cae a tierra y su descomposición se acelera,
los mismos animales e insectos
se sirven de su carne para alimentarse
y cuando no queda nada de ella
finalmente la semilla es liberada.
Esta penetra el suelo, se abre,
se enraíza y recién allí surge
el verdadero Hombre.

lunes, 25 de abril de 2011

Ignacio


La sonrisa de un ángel,
el rostro de un niño,
la fuerza de un hombre,
el espíritu de un mártir.
Fuiste todo eso y
fuiste mucho más
hermano mío.
Tu nombre pareció
sellar tu destino,
Ignacio, Hombre de Fuego,
te llamaron.
Tanto fue así que tu cuerpo
parecía no poder contener
tan grande espíritu, de tal forma
que este se consumía con las llamas
que de él se desprendían.
Y como el papel echado a las brazas
se consumió en lo que dura un suspiro
para dejar libre tu espíritu,
para soltar tu alma.
Y yo tuve el privilegio de observar
un solo segundo el encandilante
destello de tu alma, y ese breve
instante me basto para querer seguirla
incluso hasta tu nueva casa.

viernes, 22 de abril de 2011

El Saltador de Estrellas


El Saltador de Estrellas es mi primera novela. Salio de la imprenta hace apenas una semana. En ella planteo ciertas incógnitas personales, sobre el cosmos, la existencia, el Bien, el Mal, pero sobre todo que haría o hasta que extremo estaría dispuesto a llegar alguien que quisiera rescatar a aquellos que ama. Ahí descubrí nuevamente el significado sacrificio heroico y por esto esta es una novela de héroes.

jueves, 21 de abril de 2011

Tan solo un recuerdo


Agacho la cabeza y te digo:
“Señor he luchado con todo lo que tengo
y aún tengo heridas por dentro”.
Y en silencio me muestras tus manos
atravesadas por los clavos
y yo me avergüenzo.
¿De que me quejo?
Si esas llagas en tus manos
son por abrazarme entero.
Y sigues en silencio,
no me recriminas
las heridas que te he hecho.
Al contrario, tu mirada me dice
que lo que queda de mis heridas
es tan solo un recuerdo
ya que tu has cargado el resto
porque yo no podía con el peso.
¿Y yo… de que me quejo?
Si ni siquiera he sido un buen Cirineo.

martes, 19 de abril de 2011

Venas…

Mis venas son los barrotes
de la celda de mi alma.
Sin ellos esta extendería sus alas
y volaría libre hacia su casa.

sábado, 16 de abril de 2011

La Flor


¿Es acaso tu belleza
la que nace desde esa llaga?

¿Acaso lo hace como la flor
que toma del estiércol lo necesario
para crecer y fortalecer su tallo
y el resto lo convierte en tierra
para afianzar sus raíces?

¿Puede ser ella la que transforma
lo hediondo en hermoso?

¿Qué es esa magia que tiene
para hacer maravilloso aquello
que en algún momento fue espantoso?

miércoles, 13 de abril de 2011

Lluvia de estrellas

Las veo caer desde el Cielo hasta esta Tierra.
Es una lluvia de estrellas la que se precipita.
Son cientos, incontable es su número.
Y a pesar de eso cada una de ellas tiene un nombre.
Única e irrepetible es en comparación al resto.
Pero esas estrellas que caen nunca más van a poder volar.
Estrellas fugaces que tuvieron su momento en la eternidad
y al cual nunca mas podrán regresar.
Ahora son simplemente rocas
y como tales quedaran en adelante adornando
esta Tierra desolada a causa de su caída fatal.

lunes, 11 de abril de 2011

Sueños de la niñez

La vida se dibuja delante del hombre como una línea en blanco. El hombre comienza a caminarla lleno de expectativas y sueños como un niño. A medida que va caminando por ella todos esos sueños y expectativas van muriendo lentamente si tiene un cierto ambiente contenido o demasiado rápido si lo lanzaron al torbellino del mundo. Luego de esto suele vivir dolido por los sueños que perdió y los que nunca va a tener en el futuro. Y si tiene alguno nunca va a ser tan hermoso como los que tenia de niño, esa frescura, espontaneidad, creatividad y mundos maravillosos nunca van a volver a él como cuando los tenía en la infancia. Y aunque él hombre sea completo, se desarrolle en varios de los ámbitos de la vida, sea un “hombre de éxito”, incluso sea un “buen hombre”. Va estar lleno de cosas por fuera, incluso puede tener algunas por dentro, pero la sensación es que nunca más va a estar completo. Le va a faltar ese pedacito pequeño, que a veces tanto despreciamos las personas por considerar poco necesario para la vida, el dulce sueño de la infancia, la niñez. Y la niñez no es inseguridad o apego a los padres por necesitar todo lo que nos dan, no es sentirse indefensos. La niñez es esa armadura de plumas que tiene los niños de poder vivir sin preocuparse por el futuro, ni por el pasado. Es la capacidad de vivir todo como un permanente juego, no importa lo que se haga, todo es un juego, tiene el peso, la importancia y la seriedad del juego. Y si no creen que para un niño es tan importante y serio jugar como para un adulto trabajar, siéntense un rato a observar a un niño jugar solo y verán que pone tanto empeño y concentración como un adulto responsable al trabajar. La diferencia con este es que el niño sigue disfrutando de lo que hace y para el es un juego. Si aprendiésemos de ellos a tomarnos las cosas mas como un juego, creo que nuestra vida podría dar un vuelco. Los niños viven con una actitud semejante a la que se ve en la naturaleza, tomando lo que necesitan y les brinda la vida y dejando todo el resto y los que le quita atrás. Por cierto que sufren y les duelen las perdidas, pero tienen también la capacidad de ser sinceros con sus sentimientos y de no esconderlos, entonces si algo les duele pueden llorar, y si les duele mucho pueden llorar mucho. No se amedrentan con los pensamientos de si quedare mal o si van a mirarme raro por largar un par de lagrimas en publico. Ellos simplemente abren la boca a todas sus anchas, llenan sus pulmones de aire y largan un enorme alarido de dolor, más si el daño fue físico. En cambio si lo que les dolió fue el corazón, lo que generalmente se da es el silencio y solo se ven caer las lágrimas a borbotones desde sus ojos por encima de sus mejillas grandes y redondas. Por el contrario nosotros los “Grandes” hemos perdido la capacidad de ser sinceros con nosotros mismos, con nuestros sentimientos, deseos y verdaderos sueños. Es cierto que cargamos con el peso y las responsabilidades de los adultos, que no tenemos tiempo para pararnos a jugar. Pero si lo notan los niños tampoco tienen tiempo para pararse a jugar, ellos simplemente lo hacen a lo largo de todo el tiempo, y a través de ello aprenden, sueñan y construyen mundos maravillosos dentro de este mismo mundo. Nunca el mundo que construyamos los adultos será tan hermoso y maravilloso como el que viven todos los días los niños. Ellos pueden pelear guerras sin que salga nadie herido más allá de un chichón, o hacer una casita con almohadones sin temor a que esta se derrumbe y mucho menos lo hará el matrimonio que crearon en su imaginación, sirven el té o café con total y entera dedicación, y con una delicadeza y detalle que asombraría a los adultos, y sin embargo de la tetera nunca sale nada más que los sueños del niño. Por esto es que pocas cosas del mundo de los adultos pueden maravillar y sorprender a un niño. Pero increíblemente hay algo que si los sorprende de sobremanera y que pasada la sorpresa les encanta y es que un adulto juegue como ellos y con ellos. Que pelee guerras de fantasía tirando granadas hechas de almohadas o bombas que se parecen a globos o incluso que dispare rayos de sus manos. Esto les encanta y los maravilla, que los adultos se adentren en su mundo, que compartan sus vivencias, sus peleas y sueños, que puedan volver a ser niños.

sábado, 9 de abril de 2011

El tesoro del Cielo


El día que partas de este mundo,
¿qué te llevaras al Cielo?

¿Cuáles serán tus tesoros más preciados?

¿Acaso el dinero?

No lo puedes agarrar con tu alma,
así que dudo que te lo lleves al Cielo.

¿Qué es entonces ese tesoro
que te llevara al Cielo?

Son las almas que tú ames,
todas aquellas que guardes en tu pecho,
aunque ellas no lleguen a merecer estar dentro.

Porque si tú haces esto,
y las amas a pesar de ellas no merecerlo,
ese tesoro que guardes en tu pecho
te abrirá las puertas del Cielo.

Y una vez que estés dentro también
lo estarán ellas al residir en tu pecho
y de esta forma les habrás abierto
las puertas del Cielo.

viernes, 8 de abril de 2011

La Flor y el Colibrí

El hombre es como un colibrí
que roba el néctar de los labios de la mujer.
Pero si ella llega a perder su dulce sabor
y sólo le queda la belleza de la flor
es muy probable que el hombre
se termine alejando de su lado
en cuerpo o en alma.

jueves, 7 de abril de 2011

Hombre

Soy una criatura de barro
que conjuga en sí mismo
el cuerpo de un animal,
la ceguera de la bestia
y el alma de un ángel.
Además llevo una joya
engarzada en mi pecho.
Es una braza candente
que me quema por dentro,
de a poco y suavemente.
Lo hace en silencio,
pero es tan fuerte que si ella
se apaga todo mi ser
comienza a desplomarse.
Mi cuerpo se encorva
y la vida como la conozco termina.
Es como si me robasen
la base fundamental de mi existencia,
el pilar que me sostiene por dentro.
Esta preciosa gema
es el secreto de la alquimia.
Lo que me une.
Aquello que puede hacer
que los opuestos se complementen
en algo nuevo, único y superior.
Y que den por resultado un Hombre.

martes, 5 de abril de 2011

El espejo de los sueños

Tiñe tu corazón de dulzura,
aunque sean incontables la
cantidad de pedazos en los que
se rompió tu sueño.
Ten en cuenta que, no hay
dolor más grande que privarlo
de la miel del Cielo.
Y si te arriesgas a entregar
tu corazón de nuevo verás,
que aquellos pedazos de cristal
del espejo de los sueños ahora
reflejan los ojos de tu amor eterno.

domingo, 3 de abril de 2011

Ricardo, Corazón de León


El otro día conocí a un rey de historias legendarias.
Un rey sin corona, sin capa y sin espada.
Un rey al que despojaron de su reino
y que solo le dejaron como lecho un banco de la plaza.
El otro día lo conocí,… volvía de la guerra
por la cual lo había dejado todo
y de la cual regresaba sin nada.
Venia de las cruzadas
cuando paso cerca de donde yo me encontraba
y me vio abatido por mis propias batallas.
Fue ahí cuando el soberano me ofreció lo único que tenia
y todo lo que le quedaba.
Las historias de sus batallas y su nada…
En ese instante descubrí el verdadero tesoro que guardaba
tras haber vencido en una lucha tan encarnizada.
Ahí estaba…,
detrás de su rostro cuarteado por las inclemencias del tiempo,
un alma viva mirándome desde los ojos del rey.
Estaba llena de llagas y de dolor,
pero tan a flor de piel que se le escapaba de su cuerpo
en el reflejo de una lagrima.
Entonces comprendí que el rey que nada tenía
era porque nada necesitaba.
Su alma había sido limpiada en el dolor
y por eso era una sola llaga.
Era por esto que podía brillar
como un diamante atravesado por el sol…
y ser El Rey Ricardo,…
el del Corazón de León.

viernes, 1 de abril de 2011

Perder el alma

El alma debe ser indefinible para que en el proceso de la vida no muera. Porque de hacerlo el Hombre como tal se pierde.

Pero que se pierde si el alma es algo incorpóreo para el captar de los sentidos humanos.

¿Acaso los sentidos definen nuestra alma o es que ella los define a ellos? ¿No puede ser simplemente que no estén relacionados? Pero de alguna forma lo están. Tal vez del simple hecho que son herramientas. Pero de ser herramientas, entonces porque nos pesan tanto. Creo que esto sucede cuando hemos perdido la capacidad de sentir el alma. Pero si perdemos justamente esta capacidad, ya de por si nuestros sentidos se están perdiendo. Y no creo que simplemente sean los físicos, que de por si tienen un principio y un reflejo en aquellos que podríamos llamar del alma. Estos sentidos del alma son los que nos permiten percibirla, llegar a ella, ponernos en contacto y acariciarla.

Pero esto denota otra pregunta. ¿Para que usamos generalmente los sentidos del cuerpo? La respuesta es simple y triste. Para definirnos. Buscamos todo el tiempo definirnos y definir el mundo que nos rodea. Categorizarlo, esquematizarlo, cuajarlo y cortarlo en pequeñas partes y retazos que llamamos definiciones. Pero que logramos con las mismas, pues destruir el mundo que nos rodea. Al definirlo en conceptos que podemos tocar y manosear solo captamos la ínfima parte de ellos. Así perdemos la cualidad de aprender y comprender, al mundo, a nosotros mismos y a quienes nos rodean. Solo tomamos partecitas de lo que nos interesa, las apilamos en nuestras mentes y le damos el titulo de verdad. Cuando lo único que logramos con esto es que la Verdad se nos escape.

¿Pero que es la Verdad? O mejor dicho ¿que busca el hombre al tratar de encontrar la Verdad?

Algo inmutable. Trata de encontrar eso que no posee. Aquello que desde el principio de los tiempos, hasta sus fines y más allá tiene la cualidad de ser imperecedero, puro, constante.

¿Pero entonces porque pretende encontrarla en cosas completamente contrarias a la naturaleza de la Verdad? ¿Por qué la buscamos en el mundo? Cuando al mundo no le pertenece la Verdad. Y si no me creen hagan este ejercicio. Encuentren en el mundo algo que no perezca, que no sea impuro y que no cambie constantemente.

De encontrarlo descubrirán que la primera cualidad que tiene es que no pertenece a este mundo. Simplemente a llegado a el por algún motivo que muy posiblemente este más allá de nuestra comprensión. Pero de llegar a comprender ese motivo también descubriremos que no son motivos de este mundo, que no le pertenecen a el y que no responden a su mandato ni a su ley. Sino que responden a una Ley superior. La de la Verdad.

A esta altura se preguntaran que tiene que ver esto con el alma. Pues todo. Acaso no es ella ese secreto que esta mejor guardado; y como la Verdad. Esta escondida en el lugar más obvio y por el mismo motivo en el único que nos olvidamos de buscar. Pero no se confundan, el alma no es la Verdad, pero si se alimenta de ella. Y como todo lo que no se alimenta correctamente en algún momento muere.

La obviamos como algo que no tiene peso en nuestras vidas. Algo que no es fundamental, ni importante. Que al perderla no se pierde nada, porque nada que no se pueda captar con nuestros cinco sentidos físicos tiene valor y “verdad” para este mundo. Y en esa concepción errónea de la realidad dejamos de buscarla y así de alimentarla porque dejamos de buscar la Verdad que solo nuestra alma puede encontrar. Es allí donde el Hombre se pierde, donde muere.