Cuando
era niño jugaba a hacer
castillos de arena en la playa,
Yo era consciente que su vida era corta,
que iban a durar lo que tardara en llegar
el agua a sus pies para comenzar
a desgastarlos desde abajo y así desmoronarlos.
Persistía en esta tarea día tras día
cada vez que iba a la playa incluso
sabiendo que al otro día no los vería mas,
que solo serían sueños, ilusiones de un solo día.
Entonces me di cuenta Dios era como un niño
en la playa haciendo castillos de arena
que solo durasen un día en lo eterno y nada mas.
Así mismo él nos seguiría creando,
dando vida aunque nosotros solo fuésemos sueños,
ilusiones de un día y nunca lográsemos
hacernos realidad trascendiendo a la eternidad.
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